domingo, 30 de septiembre de 2012

¿Y cuán alto puedes volar con las alas rotas?


Mi estado animico es una mierda.
Estoy cansada de que todo en mi sea una montaña rusa, que un dia estoy bien, excelente, feliz, animada, optimista, al siguiente me destruyen, me quiero morir, me quiero cortar, quemar, quiero que alguien me pegue, quiero pegarme yo misma, quiero dormir, tomar pastillas, tomar lo que sea.
Hoy fui a la clinica sufro de "Sintomas psicosomaticos", no se como explicar la reaccion de mi mamá, fue una histeria, como si el mundo, la "perfeccion" y felicidad de nuestra familia se hubiese caido, pero se enojo, me retó por enfermarme porque lo que me pasa se manifestara en sintomas fisicos, quedó en un "le compraremos los remedios" por mi, esta bien, mientras mis vomitos, dolor de cabeza, mareos y frio se detengan.
Me esta matando como solo esa persona puede arruinar mi dia, una pelea, una discucion hace que todo cambie, me mata que un dia discutamos, otro riamos, otro lloremos, otro me diga "te amo, eres lo mejor", otro me grite, otro me ria, otro le grite, pero que lo quiera y lo ame y lo adore mas, porque a pesar de todo el es todo. Me hace mal, me afecta muchisimo, siempre tiendo a irme a los extremos, o es blanco o es negro.
Me siento una tonta, los gritos de mi mamá, sus retos, el hacer todo mal, prefiero estar lejos de ella y por eso trato de salir lo mas que puedo de la casa, no soporto estar ni con mi papa ni con mi mamá ni menos cuando pelean a cada rato, cuando mi mamá se altera y lo reta, cuando el se aburre y le contesta, me hace peor que escuchar sus criticas.
Espero que esta semana sea "tranquila" al menos en lo academico lo será.
Espero poder terminar mis libros y empezar con "Las cronicas necromanticas"

1 comentario:

Kiki Gruñitos dijo...

Al leerte me identifiqué. Tu y yo nos parecemos.
Somos aquellas que son felices con cotidianidades simples, pero que a la vez situaciones míseras e insignificantes pueden derrumbarnos.